Tango: ótima seleção de milongas feita pelo Clarín

¿cómo fue esa otra vida sin bailar?

 

557449_502567599771927_524434090_n

O Clarín publicou este mês uma boa matéria sobre milongas em Buenos Aires, que recomendo que seja lida na íntegra, AQUI

O texto traz ainda uma seleção de tanguerias e um roteiro de milongas fora da capital argetina.

De qualquer maneira vou reproduzir abaixo a seleção de milongas que eles fizeram, cada um com seu perfil, porque está supercompleta.

Serviço prontinho para quem está chegando para passar a Páscoa em Buenos Aires.

 

Salón Canning

Por “Canning” se entendiende avenida Scalabrini Ortiz 1331, en el barrio de Palermo. Este agradable salón representa una de las mejores pistas de la Ciudad de Buenos Aires y es uno de los sitios obligados de la movida milonguera semanal. En particular, el espacio que funciona los lunes, martes y viernes, El Parakultural, es histórico (aunque no siempre funcionó en este salón). Lo más recomendable es ir los lunes y martes, cuando suele haber orquesta en vivo, aunque siempre puede sorprender un espectáculo de alguna pareja destacada en la mitad de la noche. Dos importantes DJ son el espíritu del Canning: Silvia Ceriani y Horacio Gabin. www.parakultural.com.ar

La Viruta

Hace años se conjugaron en La Viruta dos grandes vertientes: La Viruta propiamente dicha (funcionaba en un local de la calle Fray Justo Santa María de Oro) y La Estrella (que copaba el patio del Club Estrella de Maldonado, en avenida Juan B. Justo). Juntos representan (hoy, en el amplio subsuelo del Centro Cultural Armenia; Armenia 1366) uno de los mayores espacios de tango de la ciudad, cita obligada de turistas inquietos y donde buena parte de los bailarines actuales tomaron sus primeras clases (las hay para todos los niveles y en variadísimos horarios). En los hechos, es un clásico como “segundo” de la noche, ya que los viernes y sábados desde las 3, y los miércoles y domingos desde la 1, el ingreso es gratuito. Si bien buena parte de la movida pasa por La Viruta (y uno no querría perdérsela), hay que considerar que la milonga a veces es masiva y las clases, muy concurridas. Tanto que se hace complejo, para los profesores, hacer un seguimiento individual. No obstante, es una puerta de entrada indiscutida al ambiente milonguero. www.lavirutatango.com

Club Villa Malcom

El Motivo Tango –como se llama una de las propuestas– es un espacio de tango joven que funciona los lunes en este club (Córdoba 5064), no en la categoría de milonga, ni tampoco como clase: aquí funciona una “práctica”, es decir, un espacio de búsqueda y experimentación, con propuestas específicas de parte de la persona o pareja a cargo del encuentro. Una propuesta similar –y recomendable– funciona los viernes bajo el título de “Tango Cool”. Y los jueves se abren las puertas de “Soho Tango”: las velitas en las mesas encienden un espacio íntimo y agradable. El Malcom tiene piso de baldosa y es un sitio informal, óptimo para quienes arrancan o quieren salir del protocolo milonguero tradicional. www.elmotivotango.com; www.tangocool.com; sohotango.blogspot.com.ar

Club Fulgor de Villa Crespo

La propuesta de este histórico club de Villa Crespo –creado en Loyola 828 por los propios vecinos, entre los que se encontraba el gran mesías del barrio, Osvaldo Pugliese– lleva el original nombre de “Práktica8 – Milonga10”, en alusión a los horarios de ambas convocatorias (los martes y sábados). Se trata de un espacio juvenil, pero no del todo informal, una propuesta íntima, sin el bullicio que tienen otros espacios de tango, en un cautivante salón con piso de baldosa y luces a media asta. www.praktika8.milonga10.com

Club Sunderland

Durante años los sábados fueron días “muertos” en el schedule milonguero, pero hoy se puede decir que es un día con excelentes propuestas. Una de ellas ocurre en Villa Urquiza (Lugones 3161), precisamente en el Club Sunderland: se han escrito muchas líneas sobre lo curioso de bailar tango en el sitio mismo donde se ubica una cancha de básquet; sin embargo, sigue siendo una experiencia que hay que recomendar. Es una milonga tradicional, en piso de baldosa, donde quien no baile puede cenar y disfrutar apreciando la calidad de los pasos de algunos de los mejores milongueros de la ciudad. www.sunderlandclub.com.ar

La Milonga del Morán 

A pasos del predio de Agronomía –Pedro Morán 2446–, esta es una de esas milongas que se hacen desear, ya que se pone en marcha algunos sábados al mes. Pero vale la pena esperar el momento e ir: suelen tocar buenas orquestas en vivo (es cierto, el sonido no es el mejor bajo ese techo de chapa…) y se pueden apreciar muestras de baile destacadas. El espacio es nada menos que un genuino club de barrio, con sus pintorescos trofeos expuestos en vitrinas, el piso de baldosa y un ambiente amigable. El público es variopinto: en una misma baldosa pueden desfilar bailarines en zapatillas o tacos dorados desbordantes de gomina (conviene consultar la agenda del mes). lamilongadelmoran.blogspot.com.ar

El Beso

Ambiente apacible, tradicional, romántico quizás y uno de los mejores pisos para bailar: así es la pista de El Beso (Riobama 416), cuyo día emblemático es los domingos. Además, los sábados funciona otro espacio interesante, La Milonga de las Morochas; los martes, Cachirulo; y los viernes, La Marshall. Una recomendación: sin necesidad de empilcharse artificialmente, no es este el lugar para ir mal vestido. La selección musical, en especial, los domingos (a cargo de Susana Molina) suele ser perfecta. www.elbesotangobar.com.ar

Centro Cultural Torcuato Tasso

Los “domingos en el Tasso” (Defensa 1575) son un clásico del baile, aunque el local es famoso por sus recitales de solistas y orquestas de nivel (ni hablar de bandoneonistas: Leopoldo Federico, Rodolfo Mederos o –para agendarse en marzo– Dino Saluzzi). El Tasso es una excelente cita de fin de semana, incluso sabiendo, en el caso de espectáculos en vivo, que dado que allí funciona un restaurante habrá que prepararse para soportar, en paralelo, el choque de cubiertos. www.torquatotasso.com.ar

Milonga del Indio – La Glorieta

Bailar al aire libre tiene un encanto único y la milonga de la Plaza Dorrego (en San Telmo, organizada históricamente por Pedro “el indio” Benavente) y La Glorieta (en Barrancas de Belgrano, creada por Marcelo Salas) son dos espacios perfectos para cambiar la rutina (a veces dramática) del domingo a la tardecita. Además, ambas son históricas y a la gorra. Sonidos del atardecer, haga frío o haga calor. www.glorietadebelgrano.com.ar; lamilongadelindio.blogspot.com.ar

Cochabamba

Queda en San Telmo, es a la gorra y su ambiente es más que amigable. No tenía nombre (más allá de Club General Belgrano) y por eso la llamaron “Cochabamba” (altura 444). Cada jueves –el día perfecto para conocerla– se ve la misma informalidad, las mismas historias, los brindis y los amigos. Ideal para ingresar en el ambiente, incluso los principiantes, que pueden aprovechar la práctica de los viernes desde las 22.30. tangocochabamba444.wordpress.com

Confitería La Ideal

Bailar o no bailar realmente da lo mismo aquí. Hay que conocer alguna vez el salón del primer piso de la Confitería Ideal (muy parecido a su salón de té, en la planta baja, ambos en Suipacha 384), para comprender algo de la dimensión histórica que encierra el tango porteño. Se lucen las paredes con boiserie, los espejos, el piso de mármol que resbala a milongueros novatos. Clases y baile hay todos los días, pero son especialmente logrados los encuentros de los viernes por la noche, desde las 22.30. www.confiteriaideal.com

La Catedral

Este es uno de los espacios de tango más extraordinarios de la Ciudad de Buenos Aires. Si bien algunos pierden tiempo refiriéndose al antiguo piso de pinotea no muy bien mantenido, hay que ir a La Catedral para entender: aquí la decoración desordenada, ecléctica, el mobiliario, la iluminación tan lúgubre como romántica, las orquestas en vivo, en fin, el ambiente en su entereza, lo vuelven un espectáculo extraño, pero muy atractivo (Sarmiento 4006). www.lacatedralclub.com

5 Comments

  • Tanira disse:

    Comemorei o Natal no La Viruta. Eu e meu namorado saímos de lá doidos para aprender a bailar el tango. Mesmo sem saber dançar, só ficar lá observando os casais foi um belíssimo programa, inolvidable.

  • Rafael disse:

    Muito boa mesmo a matéria, Gisele! Uma das poucas que li que não usa a retórica da perda nem que apregoa um saudosismo excessivo!
    Aliás, me parece que a Parakultural às segundas-feiras está ficando um lugar um pouco hostil aos iniciantes (e a quem só vai lá para ver também).

Deixe uma resposta

O seu endereço de e-mail não será publicado. Campos obrigatórios são marcados com *